Hace años escribí una lineas que recordé en mi ultimo viaje a Cantabria,donde pude visitar una exposición dedicada a la vanguardia rusa y la relación de la misma con el Cosmos.
Hace años,me quede en Kandisnky, era un día soleado pero hoy con la lluvia recuerdo aquel día y recuerdo el porque de esas lineas que cobraron sentido en Santander cuando mis ojos lloraron al ver un Kandisnky,cuando la abstracción paso a ser bella,a colmar mi alma y ser, a sentirme siglos después como el escritor francés Stendhal que según dicen en 1875 durante una vista a la ciudad de Florencia, al entrar en la Iglesia de Santa Croce, se sintió aturdido ante tanta belleza.
Como bien escribió más tarde; "Había llegado a ese punto de emoción en el que se encuentran las sensaciones celestes dadas por las Bellas Artes y los sentimientos apasionados. Saliendo de Santa Croce, me latía el corazón, la vida estaba agotada en mí, andaba con miedo a caerme".
Aquel día en Cantabria me sentí así, me detuve durante más de 10 minutos,sin saber porque entre el suelo y el limbo,con los ojos colmados de lágrimas, entendiendo porque me que en Kandisnky.
" Me quede en Kandinsky,
absorta por la belleza de sus lienzos
y en un silencio inquebrantable
destaparon aquellos lienzos los entramados de mi ser.
Me quede en Kandinsky
con la soledad de un genio,
ante la diferencia mundana del universo.
Me quede en Kandinsky
inmóvil frente al dinamismo;
como roca inerte decidí vivir allí ante él
y ahora ante mis ojos descubrí
que tan solo Kandinsky ...
me entiende"
Vanessa Ch.
